Algunos aspectos científicos

Hoy quiero incidir en algunos aspectos científicos relacionados con el problema.

En primer lugar deciros que se ha producido la desconexión entre el sistema de aguas superficiales y el de aguas subterráneas generando el secado de tramos de ríos y de humedales, llegando a desaparecer de forma temporal las Tablas de Daimiel y permanente en los Ojos del Guadiana y otros humedales, de tal forma que las especies y comunidades a ellos asociados se han visto negativamente afectados, modificándose profundamente la dinámica de estos ecosistemas desde 1984, funcionando actualmente como una gran balsa de recarga.

A esto hay que añadir los profundos cambios que se han producido en la composición química de las aguas del humedal, que antes venía determinado por el equilibrio entre las aguas de composición más mineralizada del Cigüela, y las aportaciones de aguas de mineralización más débil del Guadiana, que hoy ya han cesado.

Respecto a los problemas de calidad de las aguas, además de contaminación localizada de origen urbano, se produce una fuerte contaminación difusa en las Tablas de origen agropecuario, lo que da lugar a la proliferación de especies alóctonas, y llegando a darse fenómenos de eutrofia.

En cuanto a los efectos sobre aguas subterráneas, destaca que las extracciones realizadas en los últimos treinta años han provocado un descenso continuado de los niveles piezométricos, generando alteraciones locales y generales de las redes de flujo subterráneo, alteración de gradientes y caudales de descarga difusa y localizada hasta la desaparición de las descargas y zonas húmedas asociadas, además del aparejado deterioro de la calidad química.

A este respecto hay que destacar las altas concentraciones de nitratos (medias anuales superiores a 50mg/l), detectadas en las redes de seguimiento y control de aguas subterráneas de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, indicando que la masa de agua subterránea estaría afectada por la contaminación.